Albert Einstein

(1879-1955) Científico nacido en Alemanía, nacionalizado estadounidense. Es uno de los científicos más conocidos y trascendentes del Siglo XX.

Frases célebres

El azar no existe; Dios no juega a los dados.

Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero si no, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío.

El problema del hombre no está en la bomba atómica, sino en su corazón.

Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera.

No entiendes realmente algo a menos que seas capaz de explicarselo a tu abuela.

No podemos resolver problemas pensando de la misma manera que cuando los creamos.

El amor por la fuerza nada vale, la fuerza sin amor es energía gastada en vano.

El que no posee el don de maravillarse ni de entusiasmarse más le valdría estar muerto, porque sus ojos están cerrados.

Solamente una vida dedicada a los demás merece ser vivida

No guardes nunca en la cabeza aquello que te quepa en un bolsillo.

Cuando las leyes de la matemática se refieren a la realidad, no son ciertas; cuando son ciertas, no se refieren a la realidad.

No sé con qué armas se luchara en la tercera Guerra Mundial, pero sí sé con cuáles lo harán en la cuarta Guerra Mundial: Palos y mazas.

Estoy absolutamente convencido que ninguna riqueza del mundo puede ayudar a que progrese la humanidad. El mundo necesita paz permanente y buena voluntad perdurable.

Las proposiciones matemáticas, en cuanto tienen que ver con la realidad, no son ciertas; y en cuanto que son ciertas, no tienen nada que ver con la realidad.

La debilidad de actitud se vuelve debilidad de carácter.

Vine a Estados Unidos porque oí que en este país existía una gran, gran libertad. Cometí un error al elegir Estados Unidos como una tierra de libertad, y es un error que en el balance de mi vida ya no puedo compensar.

La alegría de ver y entender es el más perfecto don de la naturaleza.

No tengo talentos especiales, pero sí soy profundamente curioso.

La belleza no mira, sólo es mirada.

Estoy satisfecho con el misterio de la eternidad de la vida y con el conocimiento, el sentido, de la maravillosa estructura de la existencia. Con el humilde intento de comprender aunque más no sea una porción diminuta de la Razón que se manifiesta en la naturaleza.

No pienso nunca en el futuro porque llega muy pronto.

¿Qué sabe el pez del agua donde nada toda su vida?.

Educación es lo que queda después de olvidar lo que se ha aprendido en la escuela.

Si no puedo dibujarlo, es que no lo entiendo.