Refranes

Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.

Cada loco con su tema.

Cada oveja con su pareja.

Cada uno sabe donde le aprieta el zapato

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar.

De aquellos polvos vienen estos lodos.

De dinero y calidad, la mitad de la mitad.

Del dicho al hecho hay mucho trecho.

Desnudo nací, desnudo me hallo: ni pierdo ni gano.

Dime con quien andas, y te diré quien eres.

Nuestro gozo, en un pozo.

El que roba a un ladrón tiene cien años de perdón.

El que tuvo, retuvo, y guardó para la vejez.

En boca cerrada no entran moscas.

En casa del herrero, cuchillo de palo.

Entre sastres no se pagan hechuras.

Haz bien y no mires a quien.

Hombre prevenido vale por dos.

La caridad bien entendida empieza por uno mismo.

La ocasión hace al ladrón.

Las cosas de palacio van despacio.

Lo mejor es enemigo de lo bueno

Los niños y los locos dicen las verdades.

Mal de muchos, consuelo de tontos.