Frases sobre los discursos
Los discursos inspiran menos confianza que las acciones.
Suelen hacer falta tres semanas para preparar un discurso improvisado.
El acento es el alma del discurso.
Preparar un discurso de diez minutos me cuesta un par de semanas; un discurso de una hora, una semana, y un discurso de dos horas siempre puedo improvisarlo.
En las arengas destinadas a persuadir una colectividad se pueden invocar razones, pero antes hay que hacer vibrar sentimientos.