Lao-tsé

(570 aC-490 aC) Filósofo chino considerado el fundador del taoísmo.

Frases célebres

Con buenas palabras se puede negociar, pero para engrandecerse se requieren buenas obras.

No vayas contra lo que es justo para conseguir el elogio de los demás.

Saber que no se sabe, eso es humildad. Pensar que uno sabe lo que no sabe, eso es enfermedad.

El que sabe no habla, el que habla no sabe.

Las palabras elegantes no son sinceras; las palabras sinceras no son elegantes.

El sabio no enseña con palabras, sino con actos.

Si das pescado a un hombre hambriento, le nutres una jornada. Si le enseñas a pescar, le nutrirás toda la vida.

El que domina a los otros es fuerte; el que se domina a sí mismo es poderoso.

Un viaje de mil millas comienza con el primer paso.

Observa todo lo blanco que hay en torno tuyo, pero recuerda todo lo negro que existe.

El hombre corriente, cuando emprende una cosa, la echa a perder por tener prisa en terminarla.

Si no puedes avanzar una pulgada, retrocede un pie.

Lo que le da su valor a una taza de barro es el espacio vacío que hay entre sus paredes.

La manera de hacer es ser.

Gobierna mejor quien gobierna menos.

Todo lo difícil debe intentarse mientras es fácil.

El valor de un acto se juzga por su oportunidad.

El que está satisfecho con su parte es rico.

Dios no recibe respuestas con palabras.

Diferentes en la vida, los hombres son semejantes en la muerte.

La perfección del que imparte órdenes es ser pacífico; del que combate, carecer de cólera; del que quiere vencer, no luchar; del que se sirve de los hombres, ponerse por debajo de ellos.

Si practicas la equidad, aunque mueras no perecerás.

Poca fe se otorga a los que tienen poca fe.

La excelencia de un gobierno no se juzga por su orden.