Frases sobre la muerte
Cuando no se teme a la muerte, se la hace penetrar en las filas enemigas.
La muerte puede consistir en ir perdiendo la costumbre de vivir.
No le temo a la muerte, sólo que no me gustaría estar allí cuando suceda.
Muy sentida es la muerte cuando el padre queda vivo.
Es más cruel temer a la muerte que morir.
La muerte os espera en todas partes; pero, si sois prudentes, en todas partes la esperáis vosotros.
¿Quién no sabe que en México seguimos al pie de la letra el precepto bíblico de alabar a los muertos? A los vivos los elogiamos cuando pueden darnos algo.
La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos.
¿Miedo a la muerte?. Uno debe temerle a la vida, no a la muerte.
El hombre que no percibe el drama de su propio fin no está en la normalidad sino en la patología, y tendría que tenderse en la camilla y dejarse curar.
Cada instante de la vida es un paso hacia la muerte.
Como un mar, alrededor de la soleada isla de la vida, la muerte canta noche y día su canción sin fin.
La fuente de todas las miserias para el hombre no es la muerte, sino el miedo a la muerte.
La muerte es el comienzo de la inmortalidad.
La muerte es más dura asumirla que padecerla.
La muerte no es más que un cambio de misión.
Muerte es todo lo que vemos despiertos; sueño lo que vemos dormidos.
Nuestra naturaleza está en movimiento. El reposo absoluto es la muerte.
No hay muerte natural: nada de lo que sucede al hombre es natural puesto que su sola presencia pone en cuestión al mundo. La muerte es un accidente, y aun si los hombres la conocen y la aceptan, es una violencia indebida.
El muerto al hoyo y el vivo al bollo.
Ni el sol, ni la muerte pueden mirarse fijamente.
Una muerte bella honra toda la vida.
Diferentes en la vida, los hombres son semejantes en la muerte.
En caso de vida o muerte se debe estar con el más prójimo.