Frases sobre el poder
Aquel que tiene gran poder debe usarlo livianamente.
Después del poder, nada hay tan excelso como el saber tener dominio de su uso.
El poder nunca es estable cuando es ilimitado.
El poder y el despotismo duran poco.
Todo poder cae a impulsos del mal que ha hecho. Cada falta que ha cometido se convierte, tarde o temprano, en un ariete que contribuye a derribarlo.
Todo poder es deber.
Todo poder es una conspiración permanente.
Todo poder humano se forma de paciencia y de tiempo.
El poder conseguido por medios culpables nunca se ejercitó en buenos propósitos.
Cuando se tiene cierta moral de combate, de poder, hace falta muy poco para dejarse llevar, para pasar a la embriaguez, al exceso.
Todos quieren ser amos y ninguno el dueño de sí mismo.
Cualquiera es poderoso para hacer.
El intento de combinar sabiduría y poder rara vez ha sido exitoso y solo por un corto tiempo.
El poder debe definirse por la posibilidad de abusar de él.
Solo tienes poder sobre las personas mientras no les quites todo. Pero cuando les has robado todo, ya no están en tu poder, son nuevamente libres.
La violencia puede destruir el poder; pero es completamente incapaz de crearlo.
Que nadie provoque desórdenes en una ciudad en la ilusión de que luego podrá frenarlos a su antojo o encauzarlos según sus deseos.
El vulgo se deja cautivar siempre por la apariencia y el éxito.
El poder no consiste en golpear siempre o con frecuencia, sino en golpear oportunamente.
Nada cambiaría mientras el poder siguiera en manos de una minoría privilegiada.
El poder no es un medio, sino un fin en sí mismo.
Sería deseable que todo el que quisiera presentar su candidatura para un cargo pudiera explicar por qué quiere ser candidato. El deseo de ser candidato parece, por sí mismo, razón suficiente para la exclusión.
La única cosa que respeta el poder es el poder.
Todo aquel que aspira al poder ya ha vendido su alma al diablo.