Sören Aabye Kierkegaard
(1813-1855) Literato y filósofo danés.
Frases célebres
La puerta de la felicidad se abre hacia dentro, hay que retirarse un poco para abrirla: si uno la empuja, la cierra cada vez más.
¡Qué irónico es que precisamente por medio del lenguaje un hombre pueda degradarse por debajo de lo que no tiene lenguaje!
La vida sólo puede ser comprendida mirando hacia atrás, pero ha de ser vivida mirando hacia adelante.
La angustia es el vértigo de la libertad.
Si realmente el período de noviazgo es el más bello de todos, ¿por qué se casan los hombres?.
Si te casas lo lamentarás. Si no te casas, también lo lamentarás.
Toma consejo de tu enemigo.
El tirano muere y su reino termina. El mártir muere y su reino comienza.
En ninguna cosa la infidelidad es más innoble y repugnante que en el amor.
La gente exige la libertad de expresión como una compensación por la libertad de pensamiento, que rara vez utilizan.
La mayoría de los hombres persiguen el placer con tal apresuramiento que, en su prisa, lo pasan de largo.
Dejemos con toda tranquilidad a la gente sabia el orgullo de no caer nunca en contradicción.
Es un deber del conocimiento humano comprender que existen y cuáles son las cosas que no puede entender.
Existen dos maneras de ser engañados. Una es creer lo que no es verdad, la otra es negarse a aceptar lo que sí es verdad.
La forma más común de la desesperación es no ser quien eres.
También yo he sentido la inclinación a obligarme, casi de una manera demoníaca, a ser más fuerte de lo que en realidad soy.