Frases cortas

Una selección de las mejores frases cortas sobre el amor, la amistad, etc para redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, etc.

La poesía nace del dolor. La alegría es un fin en sí misma.

No siempre depende de nosotros ser pobres; pero siempre depende de nosotros hacer respetar nuestra pobreza.

El amor consiste en dos soledades que se protegen, limitan y procuran hacerse mutuamente felices.

El hombre vulgar espera lo bueno y lo malo del exterior, el hombre que piensa lo espera de sí mismo.

La esperanza es en sí una especie de felicidad y tal vez, la máxima felicidad que se puede obtener en este mundo.

Yo nunca seré de piedra.
Gritaré cuando haga falta.
Reiré cuando haga falta.
Cantaré cuando haga falta.

Jugar limpio significa, ante todo, no culpar a los demás de nuestros errores.

El triunfo de un ideal moral se logra por los mismos medios inmorales que cualquier triunfo: la violencia, la mentira, la difamación y la injusticia.

Nos ocupamos mucho de ser gentes de bien según la ley de Dios; no sabríamos serlo según nosotros mismos.

El que elige mal para sí, elige mal para el prójimo.

La lógica es buena para razonar, pero mala para vivir.

Si dudas de ti mismo, estás vencido de antemano.

Si no tuviéramos defectos no sentiríamos tanto placer descubriendo los de los demás.

Qué le voy a hacer, soy un esperanzado sin remedio.

Podemos decir que estamos realmente vivos, solamente en esos momentos en que nuestros corazones son conscientes de nuestros tesoros

Me marché con el puño cerrado... Vuelvo con la mano abierta.

La humanidad no puede soportar mucha realidad.

Que no fuiste el amor de mi vida, ni de mis días, ni de mi momento. Pero que te quise, y que te quiero, aunque estemos destinados a no ser.

La curiosidad de conocer las cosas ha sido entregada a los hombres como un castigo.

El sol no espera a que se le suplique para derramar su luz y su calor. Imítalo y haz todo el bien que puedas sin esperar a que se te implore.

Es el otro el que siempre nos salva. Y si hemos llegado a la edad que tenemos es porque otros nos han ido salvando la vida, incesantemente.

La vida no se nos ha dado para ser felices, sino para merecer serlo.

Entre todas las formas de cautela, la cautela en el amor es, posiblemente, la más letal para la auténtica felicidad.

Nunca he cometido ningún error en mi vida; al menos, ninguno que no haya podido justificar después.