Frases cortas

Una selección de las mejores frases cortas sobre el amor, la amistad, etc para redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, etc.

No confíes en tus sentimientos, porque, sean cuales sean ahora, muy pronto habrán cambiado.

Quiero ser capaz de estar sola, encontrarlo nutritivo, no una simple espera.

Hay mucha gente que piensa que el domingo es una esponja que limpia los pecados de toda la semana.

La lección es siempre una sola: lanzarse de cabeza y saber aguantar el castigo.

Así en la vida, muchas veces, no se sabe si es uno el que empuja los acontecimientos o si son los acontecimientos los que le arrastran a uno.

Los momentos más felices que mi corazón conoce son aquellos en que derrama su afecto sobre unas cuantas personas estimadas.

Pues si te empeñas en soñar te empeñas
en aventar la llama de tu vida.

Deberíamos conocer lo que nos confunde de aquellos con los que vivimos y a los que queremos.

Quien quiere acertar, aguarda.

La virtud de un hombre no debe medirse por sus esfuerzos, sino por sus obras cotidianas.

Amar duele. Es como entregarse a ser desollado y saber que en cualquier momento la otra persona podría irse llevándose tu piel.

La verdadera educación debe limitarse solo a los individuos que quieren aprender, el resto es mera cría de ovejas.

Bienaventurado el hombre que no espera nada, porque nunca será decepcionado.

Cuando no encontré motivo alguno para compadecerme, lo hice por respeto a mí mismo.

Los encantos llaman la atención, pero el mérito gana el alma.

Ni el pasado ha muerto
ni está el mañana,
ni el ayer escrito.

La originalidad es la única cosa cuya utilidad no pueden comprender los espíritus vulgares.

La opinión es la enemiga directa de la verdad.

Si no plantamos el árbol de la sabiduría cuando jóvenes, no podrá prestarnos su sombra en la vejez.

Las palabras son la más potente droga utilizada por la humanidad.

Un esclavo es aquel que espera a que alguien venga a liberarlo.

La vida es una broma; y todo apunta a ello. Eso pensé un día, pero ahora lo sé.

Dejemos con toda tranquilidad a la gente sabia el orgullo de no caer nunca en contradicción.

Pero el miedo tiende a hacer, precisamente, que suceda lo que uno teme.